domingo, 8 de julio de 2007

El trabajo de aprender

Fotos del zoo
El rey de la selva, flamante


Las novedades son las siguientes: estoy trabajando como garzona en un restaurante de comida italiana; Archie’s Pizzería. Archie es el dueño, un italiano cincuentón y explotador. Mi primer trabajo en Auckland es todo un desafío, estoy haciendo algo que demanda mucho esfuerzo; poner mesas, limpiar, llevar platos, recoger mesas, todo bajo presión, por el salario mínimo, es decir el trabajo apenas alcanza para pagar la renta, sin embargo el horario me deja casi todo el día libre (trabajo de 18:00 hrs hasta las 22:00 o 23:00 hrs) y los fines de semana para buscar otro empleo. Además, este trabajo me permite ganar experiencia sobre la rutina en un restaurante.
Les cuento un poco como llegue a este lugar; recuerdan el chileno del cual les comente en un post anterior, él me dio el dato esa vez, a pesar que él nunca trabajó en la pizzería, sabía que el italiano contrataba chilenos, argentinos y brasileños que tenían la Working Holiday Visa. Así que fui el martes para allá, no había ido antes porque no había parado de llover, hable con Archie (mi actual jefe) y él me dice: “ok, puedes comenzar esta tarde”. Yo le dije que bueno, así que después de eso, eran como las 3:30 de la tarde, me fui a comprar pantalones negros, necesarios para el trabajo, tome el bus, porque tengo que tomar bus para ir y volver de la pega, llegue al departamento a las 4:30, le hice una basta estilo Isabel Jorquera al pantalón, es decir un hilvanado ultra rápido, gigante por dentro e imperceptible por fuera, no muy prolijo pero los pantalones se ven impecables. Era la primera vez que hacía una basta en mi vida. Termine a las 5:05, mientras me comía unos panes con mermelada de damasco, Salí corriendo a las 5:20 de la tarde porque tengo que caminar diez minutos al paradero del “Link”, así se llama mi bus, corrí casi tres cuadras cuando vi que el bus venía y lo alcance a tomar. Llegue a las 6:00 de la tarde “sharp”, ósea en punto. Ese día era mí día de prueba, junto conmigo, llegó Antonella, una brasileña súper simpática y amable, ella también empezaba su turno, la diferencia es que ella lleva 2 meses y medio trabajando allí. Ella me dio instrucciones y fue muy comprensiva. Al final del turno el italiano explotador se acerca y me dice “crees que te la puedes”, yo le respondo que sí. Le pregunte cuanto pagaba: “ah, se paga dependiendo del esfuerzo”, mentiroso, yo ya les había preguntado a las niñas y ellas me habían dicho que pagaba 9 dólares la hora “before tax”, es decir, al final voy a ganar 7 dólares la hora. Muy poco. Pero yo ya lo sabía.
Al lado de la pizzería hay otro restaurante, “Bistro”, también le pertenece al italiano, allí trabaja una argentina re chora llamada Florencia, ella me dijo “Che, este italiano de mierda te paga una cagada, tenes que buscarte otro trabajo”. Todos tienen más de un empleo acá; esta chica argentina, Antonella y con casi todos los que converso, así que el misterio es ¿cuál ira a ser mi próximo trabajo?

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola Yulai, por fin novedades. Me alegra mucho ue ya tengas trabajo, pero por lo que me cuentas, tienes que buscar algo mejor, pero antes que eso tienes que decirle a la guatona que te devuelva el paragua, que no sea guiña. Que se cree.... No pare de reir cuando dijiste que era tu primera basta. Eso solo tiene dos explicaciones; los chilenos somos mas chicos o tu eres muy mimada. De cualquier forma un saludo y un beso grande.
Suerte, que de todo se aprende..