miércoles, 29 de agosto de 2007

Hablar no es lo mismo que comunicarse

El trabajo en el Duxton ha sido todo un desafio, pero un desafio comunicacional, a pesar de mis arduos estudios de inglés, las cosas a veces se ponen un poco dificiles. No es lo mismo practicar el inglés, preparar con anticipación tus discursos y revisar los prosibles errores, que tener que hablarlo día a día en situaciones siempre inesperadas. Me he visto en innumerables aprietos por el simple hecho de no entender nada de lo que me hablan, sin embargo así como me he visto en aprietos, así también estoy aprendiendo; palabras, expresiones, y lo mejor es que cada vez logro entender más. Pero cuesta, sobretodo cuando muchas veces tengo que contestar el teléfono y escuchar conversaciones que no vienen con un contexto armado, porque pueden preguntarte por un sinnumero de cosas y la mayoría de las veces hablan a cien por hora, así que tengo que decir I'm sorry what was that again, algo así como disculpe me podría repetir. Suele volverse frustante algunas veces, cuando no logras entender o darte a entender, a veces me atoro, quiero decir algo y no me sale o me sale pero terriblemente mal construido y es en esos momentos cuando me digo a mi misma, pero que inglés más malo estás hablando, tú puedes hacerlo mucho mejor. El problema es que como todo es rápido y espontaneo, la construcción linguística en mi cabeza ocurre en español, entonces llego y hablo en un inglés traducido, pero creo que lentamente todo esto va mejorando, es cuestión de pasar más y más tiempo con gente que hable inglés y eso es lo que estoy haciendo, trabajando 40 horas semanales y hablando y hablando y escuchando y escuchando todo el rato que paso en el hotel.
La lengua es clave para poder comunicarse apropiadamente, a veces quisiera dar o comentar mi punto de vista sobre tantas materias y no lo logro porque no me sale y me siento mal, porque la manera en que las personas te perciben no es la misma que si estuvieras hablando tu idioma materno, sin embargo ahí radica el desafio, lograr romper esa barrera comunicacional y la única forma de lograrlo es dominar la lengua extranjera a la perfección, por eso también estoy leyendo harto y cada vez que puedo veo algo de tele. Antes me gustaba ver las noticias pero ahora por mi horario no puedo, trabajo de 14:30 a 23:00 hrs de miércoles a domingo. Pero tiene su lado positivo, hay que ser muy valiente y atreverse a preguntar, atreverse a cometer errores, a hacer el loco, porque el resultado final es siempre aprendizaje. Como por ejemplo la parte de estacionar autos, quien me viera y quien me vio, yo, que viví espantada de tomar un volante por casi 5 años, ahora estaciono autos, y no autitos, autos, los mas lindos que me han tocado han sido un BMW y un Audi, el otro día llego tremendo Porshe amarillo al hotel, yo lo vi y pense "ay, ay yo quiero manejarlo", se baja el tipo del auto viene directo a mi y me dice que viene a ver a un huesped y yo le pregunto altiro do you want me to park it for you?, quiere que se lo estacione, y él me responde que no, que sólo va a estar 5 minutos pero me pasó las llaves por si había que moverlo, yo miraba el auto a través del ventanal y pensaba que joya de vehículo, quiero poner mis piesesitos en él y contarle a el César que manejé, aunque sea por el estacionamiento, un auto de lujo. También he tenido que estacionar tremendos monstruos de vehículos, vans y camionetas, altas y anchas y el estacionamiento es lo más enano que hay, estrecho y bajo. Tengo que confesar que sólo una vez en las 5 semanas que llevo trabajando en el hotel, raspe un auto, fue una van y la pase a llevar en una curva del estacionamiento, pero fue poquito porque después me fije y casi no se notaba, evidentemente no dije nada ya que el daño era imperseptible. Lo otro es que que todos los autos son distintos, uno se imagina que todos son estandares, pero resulta que cada vez estos vehículos son más modernos y mis percances han variado, desde el punto de no poder bajar la ventana del auto porque no había botón, pasando por no encontrar el freno de mano (particularmente en las mitsubishi) hasta no poder pasar los cambios porque la palanca, que estaba en el manubrio del auto, tenía una maña especial. Me he puesto nerviosa pero nunca me he atarantado, cuántas veces se han subido en autos que no son suyos para manejarlos, usualmente cuando eso pasa uno se toma un par de minutos, para ver donde estan las luces y los comandos importantes, aca es lo mismo pero sin ese tiempo.
De repente también me vienen todos los monos, sobretodo cuando tengo que realizar tareas poco gratas y me digo a mi misma, qué cresta estoy haciendo y por que no me devuelvo a mi país. Pero cuando veo que mi inglés progresa y cuando miro las fotografias de lugares hermosos de Nueva Zelanda que pronto podre conocer, me armo de paciencia y me consuelo. La tarea más ingrata es llevar toneladas de maletas a gente que lo único que hace es darte las gracias en vez de darte propina y lamentablemente es así la mayor parte de las veces porque los kiwis no tienen una cultura de dar propinas, si tienes suerte y te toca llevarle las maletas a un norteamericano, te llevas propina, también algunos australianos dejan un poco, los asiáticos ni en sueños te dejan algo.
Ser portera no es el trabajo más glamoroso del mundo, de todas maneras prefiero recepción, para lo cual también fui contratada pero mi entrenamiento en esa área aun no está completo, todavía necesito aprender el proceso del check out, porque ya hago checking ins. Pero es un trabajo que me permite aprender mucho, conocer el funcionamiento de un hotel, derribar miedos y prejuicios y sobretodo comunicarme en inglés en un cien por ciento.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Que molesto es no poder hacerte entender, yo tb lo he vivido. Lo bueno es que como tu estas 100% sumergida en un ambiente inglés pronto lo harás sin problemas, y con la fluidez y velocidad que quieras.
Del resto nada, solo ánimo, al trabajo no hay que quererlo o amarlo, hay que respetarlo, porque es él quien te permitirá, finalmente, tener recursos para realizar tus sueños.
AAhhh....que envidia si hubieses manejado ese auto.
Besos
Andrés
P.S.: la patrona siempre me pregunta por tí, llámala cuando puedas, tu la conoces.